BPF para industrias de empaques: qué quiere decir y por qué es obligatorio
- Juan José Restrepo Gómez
- 23 sept
- 5 Min. de lectura
Los empaques no solo protegen un producto: también son responsables de su seguridad sanitaria. Por eso, el INVIMA exige que los fabricantes de empaques para alimentos y medicamentos cumplan con las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF). Este certificado confirma que la empresa cumple con estrictas normas de higiene, control de calidad y trazabilidad.
En este artículo le explicamos qué significa BPF en la industria de empaques, por qué es obligatoria, qué aspectos evalúa el INVIMA y qué riesgos existen si una compañía opera sin esta certificación.
En resumen
BPF significa Buenas Prácticas de Fabricación y es una certificación obligatoria expedida por el INVIMA para empresas que fabrican empaques con contacto directo con productos alimenticios o farmacéuticos. Esta certificación garantiza que los procesos de producción cumplen con estándares sanitarios que protegen la salud del consumidor final.
La certificación BPF establece requisitos técnicos sobre instalaciones, maquinaria, personal, materiales y procesos de fabricación. Incluye aspectos como control de temperatura, trazabilidad de materias primas, procedimientos de limpieza y desinfección, y capacitación del personal en manipulación higiénica de materiales.
Las empresas que fabrican plegadizas, etiquetas, bolsas o cualquier empaque que tenga contacto con alimentos o medicamentos deben contar con BPF vigente. El incumplimiento puede resultar en decomiso de productos, cierre temporal o definitivo de instalaciones y multas económicas significativas.
Impresos Comerciales de LA PATRIA cuenta con certificación BPF vigente y más de 102 años de experiencia en la industria gráfica. Ofrece fabricación de plegadizas personalizadas con materiales certificados para contacto alimenticio, procesos auditados por el INVIMA y entregas a nivel nacional con tiempos competitivos.
Qué significa BPF en la industria de plegadizas
BPF es la sigla de Buenas Prácticas de Fabricación. Se trata de un conjunto de normas técnicas y sanitarias que regulan los procesos de producción de plegadizas destinadas al contacto con alimentos y medicamentos.
En Colombia, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) es la entidad encargada de expedir y supervisar la certificación BPF. Esta certificación confirma que una empresa cumple con los estándares mínimos de calidad, higiene y seguridad en sus instalaciones y procesos.
La certificación BPF no es opcional para las empresas que fabrican plegadizas con contacto directo con productos de consumo humano. Es un requisito legal establecido en el Decreto 3075 de 1997 y sus modificaciones posteriores.
Por qué es obligatoria la certificación BPF
Las plegadizas no son elementos neutros. Los materiales, tintas y adhesivos utilizados pueden migrar al producto contenido. Esta migración representa un riesgo para la salud si los procesos de fabricación no cumplen con normas sanitarias.
La certificación BPF protege tres aspectos:
Seguridad del consumidor: garantiza que las plegadizas no contaminan los productos con sustancias tóxicas, microorganismos o partículas extrañas.
Cumplimiento legal: las empresas que comercializan alimentos o medicamentos solo pueden trabajar con proveedores certificados. Sin BPF, una imprenta no puede participar en licitaciones ni atender clientes del sector regulado.
Trazabilidad: permite identificar el origen de cualquier problema de calidad y tomar medidas correctivas inmediatas.
Qué aspectos evalúa el INVIMA para otorgar BPF
La certificación BPF implica una auditoría exhaustiva de las instalaciones y procesos. El INVIMA verifica los siguientes aspectos:
Instalaciones físicas
Las áreas de producción deben estar separadas de zonas contaminantes. Los pisos, paredes y techos deben ser lisos, impermeables y de fácil limpieza. Se requiere iluminación adecuada y ventilación controlada para evitar acumulación de polvo y humedad.
Maquinaria y equipos
Las máquinas de impresión deben estar limpias y en buen estado. Los rodillos, cuchillas y superficies de contacto no pueden presentar óxido, grietas o residuos. Se debe contar con un programa de mantenimiento preventivo documentado.
Personal
Los operarios deben recibir capacitación en manipulación higiénica de materiales. Se exige el uso de uniformes limpios, gorros y protección adecuada. El personal debe someterse a exámenes médicos periódicos.
Materias primas
Los papeles, cartulinas, tintas y adhesivos deben contar con certificaciones de grado alimenticio o farmacéutico. Se debe verificar que los proveedores cumplan con normas de calidad y seguridad.
Procesos de fabricación
Cada etapa de producción debe estar documentada. Se requiere control de temperatura, humedad y tiempos de secado. Los productos terminados deben almacenarse en condiciones que eviten contaminación cruzada.
Control de calidad
Se debe implementar un sistema de inspección que detecte defectos, contaminantes o desviaciones en especificaciones. Los registros de control deben conservarse por un periodo mínimo establecido por el INVIMA.
Qué productos requieren plegadizas con certificación BPF
La certificación BPF es obligatoria para plegadizas que tengan contacto directo con los siguientes productos:
Alimentos procesados: galletas, cereales, lácteos, carnes, snacks, dulces, bebidas, condimentos y productos de panadería.
Medicamentos: tabletas, cápsulas, jarabes, ungüentos, parches y productos de uso tópico.
Suplementos dietarios: vitaminas, minerales, proteínas en polvo y productos nutricionales.
Dispositivos médicos: gasas, vendajes, apósitos y material quirúrgico.
Las plegadizas para productos de limpieza, cosméticos o uso industrial no requieren certificación BPF, aunque pueden estar sujetas a otras normas técnicas según su aplicación.
Cómo obtener la certificación BPF
El proceso de certificación BPF consta de varias etapas:
Solicitud ante el INVIMA
La empresa debe presentar documentos como Cámara de Comercio, RUT, planos de instalaciones y descripción de procesos. Se debe pagar una tarifa establecida por la entidad.
Auditoría de diagnóstico
Un equipo de inspectores del INVIMA visita las instalaciones para evaluar el cumplimiento de requisitos. Se genera un informe con hallazgos y no conformidades.
Implementación de acciones correctivas
La empresa debe corregir las deficiencias identificadas en un plazo establecido. Esto puede incluir adecuaciones físicas, compra de equipos, capacitación del personal o ajustes en procedimientos.
Auditoría de verificación
El INVIMA realiza una segunda visita para confirmar que se implementaron las correcciones. Si todo cumple, se expide la certificación BPF.
Mantenimiento de la certificación
La certificación BPF tiene vigencia de dos años. Durante ese periodo, el INVIMA puede realizar visitas de seguimiento para verificar el cumplimiento continuo de las normas.
Consecuencias de no contar con BPF
Las empresas que fabrican plegadizas sin certificación BPF enfrentan riesgos legales y comerciales:
Sanciones del INVIMA: multas económicas, decomiso de productos, suspensión temporal o cierre definitivo de instalaciones.
Pérdida de clientes: las empresas de alimentos y medicamentos no pueden trabajar con proveedores sin certificación. Esto limita las oportunidades de negocio.
Responsabilidad legal: si una plegadiza contamina un producto y afecta la salud de consumidores, la empresa fabricante puede enfrentar demandas y procesos penales.
Exclusión de licitaciones: las entidades públicas y privadas exigen certificación BPF como requisito para participar en procesos de compra.
Diferencia entre BPF e INVIMA
Existe confusión frecuente entre estos dos términos. INVIMA es la institución gubernamental que regula y supervisa. BPF es el certificado que esta institución expide a las empresas que cumplen con las normas.
No todos los productos registrados ante el INVIMA requieren BPF. El registro sanitario es un trámite diferente que certifica la formulación y etiquetado de un producto. La certificación BPF, en cambio, evalúa los procesos de fabricación de plegadizas.
Impresos Comerciales de LA PATRIA y la certificación BPF
Impresos Comerciales de LA PATRIA cuenta con certificación BPF vigente para la fabricación de plegadizas destinadas a alimentos y medicamentos. Esta certificación respalda más de 102 años de experiencia en la industria gráfica.
La empresa utiliza maquinaria de última tecnología que permite impresión en materiales certificados para contacto alimenticio. Los procesos incluyen control de temperatura, trazabilidad de materias primas y procedimientos de limpieza validados por el INVIMA.
Las plegadizas fabricadas en Impresos Comerciales cumplen con requisitos para sectores como panadería, confitería, lácteos, cárnicos y productos farmacéuticos. Los materiales utilizados son reciclables y compostables, lo que suma valor ambiental a la certificación sanitaria.
Cotice plegadizas con certificación BPF
Si su empresa fabrica o comercializa productos alimenticios o farmacéuticos, requiere plegadizas con certificación BPF. Impresos Comerciales de LA PATRIA ofrece plegadizas diseñadas según sus especificaciones, con materiales certificados y procesos auditados por el INVIMA.
Contáctenos y reciba su cotización personalizada. Nuestro equipo asesora sobre formatos, materiales y acabados que cumplan con las normas sanitarias aplicables a su producto.
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